viernes, 21 de septiembre de 2012

Psicología Deportiva Alimentando a la mente para un óptimo rendimiento

Psicología Deportiva

La preparación mental de un atleta puede ser la diferencia entre ganar y perder. A pesar de que ganar no debe ser el único objetivo, el triunfo juega un papel importante en el trabajo del entrenador. Además de hacer a sus jugadores mejores atletas, los entrenadores tienen el trabajo de guiarlos para que sean mejores personas. La gente buena será más fuerte mentalmente y tendrá el deseo de ganar en el último cuarto de tiempo. Al conocer y emplear las siguientes tácticas, el entrenador puede ayudarse a desarrollar un programa de victorias en todos los niveles.

Defina el programa
Elabore un enunciado de la misión para ayudar a definir los objetivos del equipo. Cada miembro del equipo, incluyendo a los jugadores, entrenadores y otros miembros del personal, deben llevar a cabo de forma responsable este acuerdo. El equipo no hace a los individuos. Los individuos hacen al equipo.
Imparta responsabilidad
Cada acción del atleta dentro y fuera del campo lo afecta a él, a su familia y a su equipo. Enseñe a sus jugadores a detenerse y a pensar. Aliente al atleta a hacerse estas preguntas:
  • ¿Puedo darme el lujo de tomar este riesgo?
  • ¿Cómo afectará esto mi futuro?
  • ¿Cómo afectará esto a mi familia?
  • ¿Cómo afectará esto a mis compañeros de equipo y entrenador?

Mantenga a cada entrenador en sintonía
El grupo de entrenadores define el clima del equipo. Ellos deben hacer los mismos sacrificios que los atletas, dar el ejemplo, mantener una actitud positiva y nunca parar de enseñar. Los atletas actúan como lo hacen los entrenadores.
Motive a los atletas a creer en ellos mismos
Si los atletas creen en sí mismos, lograrán más dentro y fuera de la cancha. Si son ellos mismos, su equipo, su colegio, sus entrenadores o sus visiones, pueden llegar tan lejos como quieran ir.
Predique estas dos palabras favoritas: DALE DURO
Ganar juegos es suficientemente difícil. ¡Pero los campeones ganan los juegos en el 4to. tiempo! No hay fórmula sencilla para esto. El equipo debe conocer antes (fuera de la cancha) al oponente para ganar algo de ventaja. El trabajo duro al final dará sus resultados.
El cambio es incontrolable y positivo
Un entrenador o atleta puede haber sido exitoso en el pasado empleando una táctica en particular. Sin embargo, esa táctica podría no funcionar en todos los niveles. No sea temeroso de realizar ajustes para alcanzar el próximo nivel de éxito. Se debe continuar un programa sólido que evolucione a medida que el equipo y los jugadores crezcan.
Disponga de un tiempo fuera de la cancha
Algunas veces los entrenadores y atletas deben olvidarse del deporte. Esto no significa dejar el deporte. Esto significa tomarse un tiempo para hablar con el equipo o los entrenadores sobre la vida. Las sesiones para compartir la vida con los demás puede hacer al equipo más fuerte y unido, así como a cada atleta una persona mejor.
Recuerde esta fórmula para el éxito
· Entrenamientos y concentración, luego, ¡más entrenamientos y concentración!
· Aquellos que dejan que las cosas pasen usualmente pierden más que aquellos que hacen que las cosas pasen.
· Si no inviertes mucho en el proceso, entonces el fracaso no será doloroso y ganar no será excitante.



Psicología Deportiva Comunicación con el atleta y su disposición al cambio


Psicología Deportiva
Comunicación con el atleta y su disposición al cambio
El éxito de cualquier entrenador, posiblemente en todos los niveles de competencia, está determinado por su habilidad para comunicarse efectivamente con sus atletas estableciendo un respaldo mutuo. Los entrenadores pueden ser expertos y muy organizados, pero sin habilidades de comunicación abierta, estos atributos nunca se verán reflejados en el rendimiento de sus atletas. Los siguientes puntos pueden ayudar a los entrenadores a desarrollar sus capacidades para realizar el cambio deseado.

1. Definición de papeles
Ofrézcale a cada atleta una idea de cómo él o ella encaja en el equipo. Reconociendo los aportes que cada jugador hace al grupo, los entrenadores pueden darle al atleta un sentido de mérito y logro. El entrenador debe inspirar en cada miembro del equipo la noción de que ellos pueden mejorar su trabajando duro y comprometiéndose.
2. Fije objetivos:
Aliente a los atletas a fijarse objetivos realistas y a comunicar cómo pueden alcanzarlos. Discuta las diferencias entre los objetivos individuales y grupales, así como la necesidad de sacrificar algunas veces los objetivos personales por los objetivos del equipo. La habilidad para alcanzar los objetivos con un sentido de propósito es una habilidad de la vida que puede ayudar a los atletas más allá de sus deportes.
3. Confianza mutua
Las relaciones positivas se construyen sobre el respeto y la confianza mutua. Los atletas deben saber que pueden fiarse de sus entrenadores justa y positivamente, inclusive en la intensidad de las competencias. Los entrenadores pueden ser críticos pero deben dejar su personalidad de lado. La crítica debe ser constructiva, positiva, consistente y orientada hacia el incremento del rendimiento. Ningún jugador mejora cuando esto ocurre a expensas de sentirse mal.
4. Autorice a los atletas
En el contexto de un ambiente disciplinado y estructurado, los entrenadores deben autorizar a sus atletas a tomar decisiones y controlar varios aspectos de una competencia. Los entrenadores deben enseñar los conceptos ampliamente para que cada atleta entienda su parte. Luego, encargarlos para que ejecuten sus partes haciendo ajustes en el camino y comunicando los problemas con los entrenadores. La responsabilidad y la autoridad deben ir mano a mano.
5. Alimente a los atletas
Los atletas no son capaces de rendir física y mentalmente sin los alimentos y bebidas adecuados. Los entrenadores deben educar a sus atletas en relación a los alimentos y selecciones de bebidas que contienen carbohidratos, debido a que los carbohidratos son la principal fuente de combustible para los atletas. Los líquidos, como las bebidas deportivas, les ofrecen más que agua debido a que reemplazan los fluidos y electrolitos perdidos en el sudor, reponiendo también energía de los carbohidratos.
6. Desarrolle un plan
Los entrenadores deben planificar las oportunidades para comunicarse así como planifican la estructura del juego. Las oportunidades para comunicarse pueden ser tan simples como buscar al atleta después de una práctica difícil y preguntarle si entendió las razones por las cuales se hicieron las críticas. Los atletas sólo pueden aplicar las orientaciones del entrenador en la medida en que puedan entender qué es lo que se desea de ellos. Una técnica excelente para desarrollar líneas de comunicación es una entrevista al final de la temporada con todos los atletas. El entrenador puede involucrar al atleta en una entrevista desarrollada en un ambiente tranquilo, de manera que el atleta sienta que se están interesando en él como persona. El entrenador debe estar deseoso de aceptar y evaluar el desacuerdo cuando sea apropiado.
7. Cuidado y aprobación
Los entrenadores consistentemente deben recordar a los atletas que el cuidado es incondicional, pero que la aprobación no lo es. Cuidar de los atletas como individuos crea confianza en tu apoyo lo que les permite crecer como deportistas y como personas. Los entrenadores deben evitar transmitir miedo al fracaso en sus métodos de comunicación y deben animar la toma de riesgos como una parte integral de la competición atlética.
En resumen, las habilidades de comunicación efectiva tienen un impacto determinante en las relaciones entre el entrenador y el jugador. Crear una atmósfera en la cual los cambios positivos puedan ser alcanzados puede ofrecer grandes beneficios tanto al entrenador como al atleta.